Hezbolá insiste en su ideario de combatir sin tregua a Israel, con quien entró en guerra en 2006, dejando 1200 muertos.
El 16 de febrero de 1985, tres años después de haberse comenzado a definir como grupo armado durante la guerra civil libanesa (1975-1990), Hezbolá publicó el manifiesto que definiría su acción posterior. Basado en el Manifiesto de los Nueve, redactado por tres grupos chiíes que aunaron esfuerzos para atacar a las Fuerzas de Defensa de Israel, expusieron sus objetivos principales, compartidos con la República Islámica de Irán. En ellos, insistieron en la dimensión guerrera del concepto musulmán de Yihad y en la demonización de Israel y Estados Unidos. Poco después, Hezbolá también se convirtió en uno de los principales actores políticos en Líbano.
Cuarenta años tras la publicación de su manifiesto, Hezbolá, junto con Hamás, es uno de los mayores artífices de la inestabilidad de la zona. En la actualidad, persisten en el odio y la lucha contra Israel y, en las dos guerras que ha iniciado -en 2006 y en 2023-, ha dejado un importante rastro de muertos. En estas cuestiones profundiza el profesor de la UNED Carlos Echeverría Jesús en una nueva Nota para la Fundación Disenso.